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Esquí alpino en Cerler y excursiones con raquetas de nieve en el valle de Benasque

Esquí alpino en Cerler y excursiones con raquetas en Benasque

Esquí alpino en Cerler con profesor de esquí titulado

El esquí alpino es una modalidad que se vale del uso de remontes mecánicos para ascender las montañas y posteriormente bajarlas esquiando. Es un deporte divertido que permite disfrutar las montañas de forma cómoda sin renunciar a los grandes paisajes.

El esquí es la principal forma de desplazamiento en invierno por la montaña y la más eficiente. Sean cuales sean nuestras aspiraciones como esquiadores los inicios siempre tendrán que pasar por una estación de esquí alpino donde aprender los fundamentos de la técnica de forma rápida y efectiva. Si decidimos aprender directamente en la montaña haciendo travesía, el apredizaje tendrá que ser forzosamente más lento debido a que sólo se dispone de una bajada diaria. En una estación de esquí como Cerler podremos condensar meses de travesía en unos pocos días adquiriendo la técnica rápidamente e iniciándonos en los descensos por nieve no tratada de forma segura y controlada.

Nuestros profesores de esquí son grandes conocedores de la estación de esquí de Cerler por lo que con ellos descubrirás los rincones más especiales y las líneas más atrevidas.

Excursiones con raquetas de nieve en el valle de Benasque

En invierno el valle de Benasque se consagra principalmente al esquí alpino en Cerler, con su estación perteneciente al grupo Aramón. Tenemos profesores titulados para impartir clases de esquí alpino pero lo que más nos gusta sigue siendo la montaña, por eso os proponemos realizar excursiones con raquetas de nieve.

Las raquetas de nieve fueron la primera forma de desplazarse por terrenos nevados, su invención fue anterior a la de los esquís. Inicialmente eran simples ramas dobladas con cuerdas cruzadas como una raqueta de tenis, pero en la actualidad son fabricadas con materiales plásticos muy resistentes a las bajas temperaturas e incluyen gran cantidad de extras como talon libre y alzas para los ascensos.

Sobre unas raquetas de nieve se puede llegar practicamente a cualquier sitio y la actividad es muy gratificante ya que, en lugar de seguir senderos como en verano, crearemos nuestro propio camino que quedará impreso sobre la nieve. Hay pocas sensaciones tan gratificantes como darse la vuelta y contemplar la propia huella marcada sobre un inmenso manto de nieve virgen. Ser los primeros en visitar una zona tras una gran nevada nos trasladará a otros tiempos en los que la montaña era una gran desconocida.

La montaña en invierno se vuelve aún más hostil puesto que la nieve siempre amenaza con lanzarse contra el montañero imprudente en forma de avalancha. El mayor riesgo en invierno es el riesgo de aludes y la única forma de evitarlo consiste en saber elegir el terreno más seguro en cada momento y llevar el material de seguridad necesario. Nuestros guías se asegurarán de que tu salida invernal a la montaña tenga el menor riesgo posible y te enseñarán como comportarte en caso de emergencia.